Estos cetáceos llegan desde las frías aguas de la Antártida a las costas pacíficas de Ecuador entre junio y septiembre de cada año. Pueden verse en ciertas partes de las provincias de Manabí, Esmeraldas, Santa Elena y El Oro.
Los primeros en llegar son los machos juveniles, a ocho millas de los puertos. Pero a finales de junio llegan las ballenas adultas, que viajan más de 8.000 kilómetros hasta las aguas cálidas del Pacífico para aparearse y tener a sus ballenatos.
Desde la Antártida pueden salir hasta 6.000 ballenas jorobadas cada año rumbo al Océano Pacífico. La predilección por nuestras costas se debe a las bajas profundidades, los numerosos arrecifes, la geología ecuatoriana y en gran medida a la temperatura del agua.
Los turistas pueden tomar buenas fotografías cuando empiezan su cortejo y dan grandes saltos.
El avistamiento de ballenas jorobadas frente a las costas ecuatorianas es una actividad turística que empezó en 1998, hace 20 años.
Durante el tour de ballenas también se pueden observar piqueros y bucear. El viaje dura tres horas. Se navega unos 40 kilómetros hasta la Isla de la Plata.
Luego se continúa a la Hostería Cuna Luna en San José para disfrutar la cena.
Dificultad: Media
Recomendamos llevar: Ropa de playa, traje de baño, sombrero o gorra, cámara de fotos, protector solar, zapatos de caucho, zapatillas, gafas, mochila.
Para mayor información acerca del tour de observación de ballenas contáctenos.
Fuente: www.elcomercio.com